sábado, 5 de febrero de 2011

Del amor y otros desastres.

Cuanto menos pienso es cuando más cosas se me ocurren. Pienso que si junto un par de sueños y le echo una pizca de esperanza podré conseguir escuchar tu voz de nuevo. Sólo una vez más, no quiero que vuelvas para quedarte pero sí que termines las reformas de mi corazón. Ahora sólo hay sombras en esta triste habitación teñida de gris desesperación, de silencios que se vuelven insoportables, de los que estallan, los que muerden. Y esque si sólo pudiera... sólo te pido cinco minutos, ¿tan importante es tu tiempo? Tengo la fuerza, la paciencia y la decisión, pero me falta una llamada, un mensaje, un triste correo electrónico, una nota bajo de mi puerta, un mensaje en el contestador, un toque al timbre, una pancarta en una avioneta... Espero atento la llamada que nunca llega, invento conversaciones para intentar llegar a saber qué es lo que te puede pasar ahora mismo por la cabeza. Muéstrame donde tengo que ir, a quién tengo que llamar, qué tengo que hacer... Tengo los bolsillos plagados de notas que escribo en el metro para que si te veo y me ignoras, podértelas meter en el bolsillo del abrigo. Escribo los silencios de mi habitación por la noche. Cubro con sábanas las mantas con las que nos tapábamos, subo el volumen de la radio mientras escucho Alejandro para ahogar el dolor intenso que sufro de no saber, cómo estarás, cómo te sentiras, qué estarás pensando, a quién le dedicarás las mediasnoches ahora... Reprimo los gritos y escribo con letra más grande para ver si tu espacio visual abarca un poco de este trocito mediocre y se decide a decirme algo, ¡A MIRARME! Me niego a la vida y bajo el corazón con la mirada, tengo una obsesión. No puedo dormir, no puedo soñar despierta, no puedo escribir nada, ¡nada! ¿Sabes lo que es eso? Nunca me había pasado y ahora que has decidido hacerte dura me has vencido completamente. He caido, escudo y lanza se han oxidado y ni siquiera se si escribiendo esto voy a conseguir algún tipo de reacción en ti. No se si ya lo habrás adivinado pero quiero que sepas que estoy desesperado, D E S E S P E R A D O por tu mirada, aunque sea de odio, o aunque sea de alegría, como la foto de mi izquierda. Quiero saber que no has muerto, que sigues viviendo y que estás bien, o que estás mal, pero quiero saberlo. ¡Joder! Ya ni siquiera me salen las jodidas palabras. Quiero llorar pero cuando lo intento sólo golpeo muebles y destrozo la pintura de las paredes. Que sepas que ya no tengo nada en las paredes. Aquella imagen que pintamos sobre fondo blanco se ha esfumado para dejar paso a una habitación con el cielo estrellado. Pero hoy no, hoy no he venido a recriminarte, hoy solo te lanzo un gran SOS para que sepas cómo me siento ahora mismo. Esto no es bueno, no es sano para mi cabeza, ¡fíjate! llevo veinte líneas y no he escrito más que cosas sin sentido. No me hace ningún bien, o tal vez sí, sólo quería desahogarme. ¿Y qué haré ahora con esta carta? Tal vez sea más productivo quemarla con el séptimo cigarro que llevo esta mañana, así a lo mejor hueles el humo y vienes a reirte de mis lamentos. Te odio. Pero en el fondo no te odio. Me odio a mí mismo por no ser predictivo, por no ¡ser! Ahora sí que ya nada de lo que escribo tiene sentido. Podría escribir días enteros repitiéndome una y otra vez porque ahora mismo no tengo ganas más que de ir a tu casa y cojerte de las orejas a ver si de una vez me entero de lo que pasa, pero en el fondo, se que no puedo hacer nada.
En resumen, quiero saber algo de ti.




He dicho.

7 comentarios:

  1. a esta asturiana le ha impresionado y emocionado intensamente tu texto, y deseo que pronto tengas noticias de la persona que tu tanto necesitas. un besin muy grande y ¡¡animo y muchisima suerte¡¡ ¡¡ no decaigas¡¡ ¡¡ mantente fuerte¡¡

    ResponderEliminar
  2. Es un circulo vicioso el tratar de que alguien que ya no te ve, o que ve a través de ti se fije en que delante de él estás tu, y no solo el vacío que te está haciendo sentir. Es una entrada muy ajustada a los pensamientos que están recorriendo mi cabeza en estos momentos, es agradable leer esto en este momento. Sigue escribiendo así que yo seguiré leyendote de la misma manera.

    ResponderEliminar
  3. Me encanta el blog, escribes de... maravillas?se queda corto:)

    ResponderEliminar
  4. Impresionane texto, lo importante es seguir, porque nunca sabrás que sorpresa haya en el camino, las mejores cosas son siempre las que llegan, nunca las que buscas, lo mejor ahora es pensar en ti y solo en ti. Me gusta mucho tu blog. Te invito al mío. Te lo digo, pero no le digas a nadie.

    ResponderEliminar
  5. Li... profundo, claro y con sentimiento :D
    Es... como verde tirando a gris!! :P
    Soy Kate (:

    ResponderEliminar
  6. Yo también paso por esa sensación de desahucio...y casi estoy acostumbrada. Ya espero sin esperar. Porque mientras aguarda pasan miles de cosas de las que no eres consciente.

    ResponderEliminar
  7. " a quién le dedicarás las mediasnoches ahora..."
    Ya te respondo:
    las pasa conmigo.No sufras, esta bien ;)

    ResponderEliminar